El Castelo de São Jorge se levanta sobre la colina más alta del centro histórico, desde aquí se puede disfrutar de una de las vistas más bellas de la ciudad, por lo que es una visita muy recomendada. La edificación consta de varias torres y garitas, un foso y dos patios grandes. Fue la residencia de los reyes de Portugal desde mediados del siglo XIII hasta principios del siglo XVI.
El recinto es bastante grande por lo que es necesario tiempo para visitarlo. En el interior cuenta con un pequeño museo cuya entrada va incluida en el precio que se paga al entrar en el castillo, un bar y un restaurante, que obviamente, dada su localización, no tiene unos precios bajos.
En el interior del castillo se hacen eventos como: mercados medievales, exhibiciones de danza medieval, de tiro al arco, etc.
Aquí podéis consultar los horarios, precios y el calendario de los eventos:
http://www.castelodesaojorge.pt
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